En algún momento, las tornas cambian. Son los niños los que cuidan a los progenitores que envejecen. Un aspecto al que se enfrentan muchos hijos adultos es el realojamiento de sus progenitores. No obstante, lo más probable es que sus progenitores hayan estado viviendo en su residencia actual a lo largo de mucho tiempo. Es donde empezaron y formaron una familia, tal vez. Es donde construyeron una vida y crearon infinitos recuerdos. Es acogedor, familiar y entre vecinos amistosos. Está en el corazón de sus rutinas y actividades diarias. Comprensiblemente, puede ser muy difícil para haga clic aquí los padres dejar su amado nido y todo lo que representa. Seguramente será un periodo significativo de ajuste, para todos, pero mudar a sus padres se puede hacer con enorme éxito.
Empiece con una charla...
Mover a tus padres es un gran inconveniente. Puede ser emotivamente cargado y logísticamente complejo. Por ende, el mejor instante para comenzar a hablar sobre este evento trascendental de la vida y tomar decisiones es mucho antes que necesite tomar medidas.
Tenga una sesión de preguntas y contestaciones. Tú y tus progenitores deben tener ciertas conversaciones serias y sinceras. A partir de estas discusiones debe establecer:
Con qué género de presupuesto trabajas
Dónde desean vivir tus progenitores (especialmente importante)
Qué género de vivienda/comunidad prefieren los progenitores (p. ej., comunidad de vida asistida, vivir con usted en su casa, condominio reducido cerca)
Si sus progenitores tienen algún requisito especial (por ejemplo, acceso a ciertos centros de atención médica)
Cualquier otro factor que haga que una nueva situación de vivienda se sienta como en un “hogar” (p. ej., cercanía a amigos, buen tiempo, espacios verdes o caminos para caminar cerca)
Priorizar y establecer esperanzas.
Con base en las preferencias de sus progenitores y las realidades de los costos residenciales y la disponibilidad, haga una lista de opciones de vivienda reales que satisfagan sus necesidades. Ordena las opciones de la más a la menos deseable. Cuando todos tienen la misma información y están en exactamente la misma página, es probable que tenga menos sorpresas desapacibles en el futuro.
Aprende más
Iniciar la discusión le llevará un largo camino, mas no es suficiente. A fin de que tus progenitores se sientan seguros y felices, es una buena idea tener tanto conocimiento de una residencia antes de decidir que es "la indicada".
Recorrer y explorar.
De ser posible, eche un vistazo de primera mano a los lugares que está considerando. (Salvo eso, intente realizar un recorrido virtual). Tenga una idea de de qué forma son las casas y los terrenos. Vea si puede conseguir una vibra para los otros residentes o la comunidad. Pasee por el vecindario para ver qué comodidades (por servirnos de un ejemplo, servicios, restaurants, tiendas, parques, etc.) están libres. Tú y tus padres deben procurar visualizarlos en ese escenario: hacer un cómputo de los pensamientos y sentimientos que brotan.
Indagar a fondo.
Tras su experiencia preliminar de las posibilidades de vivienda, consulte las recensiones on line, las calificaciones comerciales y cualquier otra credencial aplicable que la instalación o la comunidad deba tener. Vea si puede conseguir referencias y hablar con los residentes actuales.
Reduzca las opciones.
De su investigación, es probable que usted y sus padres tengan ideas sólidas sobre qué opciones de residencia son viables. Esto es algo bueno y útil de saber. Considere la posibilidad de crear una lista de pros y contras para cada uno de los principales contendientes, para ayudarlo a reducirlo aún más o determinar los dos o tres que verdaderamente tiene la intención de perseguir. (Definitivamente tenga cuando menos un par de opciones de respaldo, en el caso de que la residencia preferida no esté disponible cuando la necesite).
Planificación de la mudanza de tus progenitores
¡Ya has hecho un montón de trabajo, pero aún no has empezado el proceso de mudanza real!
Basados en nuestra amplia experiencia, estos son nuestros mejores consejos para que la una parte de "mudanza" del reasentamiento de sus padres sea lo menos difícil posible.

Empiece temprano y deje mucho tiempo.
Hay muchas piezas móviles en este tipo de mudanza y, de forma frecuente, la comunicación y la toma de resoluciones pueden retardar un tanto más por el hecho de que hay más personas involucradas. Las mudanzas de larga distancia y de temporada alta pueden demorar más en programarse debido a la disponibilidad de equipos de mudanzas y camiones. Asimismo debe estimar que muchas comunidades residenciales y hogares de vida asistida tienen listas de espera. Además de esto, puede tomar algún tiempo para que sus padres reduzcan el tamaño o almacenen sus posesiones, arreglen sus temas financieros, etc. Si la mudanza de sus progenitores requiere renovaciones, tenga en cuenta también ese tiempo de contestación.
Comunicar, Comunicar, Comunicar.
Las posibilidades de éxito mejoran enormemente cuando hay líneas abiertas de comunicación de principio a fin. Los circuitos de retroalimentación, la participación en cada paso del camino y el simple hecho de comunicarse entre sí de forma regular pueden hacer que tanto tú como tus padres se sientan escuchados.
Consiga ayuda profesional.
Mudar a los padres es un tema complicado. Por lo tanto, confiar en los expertos es una resolución inteligente. Los transportistas profesionales pueden facilitar la logística, asistir con el embalaje y ocuparse de todo el levantamiento y la entrega. De igual modo, hay profesionales para asistirte con la planificación financiera, la atención médica, los servicios sociales y otros aspectos de la mudanza. Aprovecha todo este conocimiento y experiencia para que puedas efectuar la mudanza de tus padres con confianza y sencillez.
Su lista de verificación para una mudanza suave
Sostenerse organizado ayudará con la comunicación y la planificación. Una exploración cautelosa y meticulosa de las opciones, seguida de una reubicación y una instalación bien ejecutadas, van a facilitar la transición para sus progenitores mayores.
Charlar las cosas.
Habla con tus padres sobre sus necesidades y preferencias de mudanza.
Cree una lista de opciones realistas conforme las necesidades, el presupuesto y la disponibilidad de vivienda de sus progenitores.
Investigar.
Reduzca las opciones.
Recorre las instalaciones o comunidades para poder ver qué les agrada a tus padres.
Consiga más información sobre las mejores opciones hablando con los residentes actuales, leyendo recensiones y otras calificaciones de calidad.
Tomar la decisión final.
Seleccione la opción que mejor se ajuste y se sienta.
Tenga un par de opciones de respaldo listas caso de que la primera opción no funcione.
Organizar finanzas personales y logística.
Comienza a ordenar la casa de tus padres.
Asegure cualquier financiamiento preciso para la mudanza o el nuevo hogar.
Encárguese de cualquier papeleo u otros requisitos (por ejemplo, petición, pago inicial, etc.) para la nueva residencia.
Consulte con cualquier otra agencia o servicio que facilite el traslado de personas mayores.
Planifica la logística de mudanzas.
Implicar a una empresa de mudanzas profesional de buena reputación.
Haz planes de viaje.
Preparación para la mudanza.
Actualice la dirección de sus progenitores con la oficina de correos, tarjetas de crédito, etc.
Actualice cualquier otro documento legal, de seguros o financiero.
Consiga los suministros precisos para el embalaje o la mudanza.
Empaca y etiqueta las pertenencias de tus padres.
Mande artículos al almacenaje, conforme sea necesario.
Realice cualquier otra tarea necesaria para organizar este movimiento.
¡Mudate!
Proporcione apoyo a sus padres.
Establecerse en el nuevo hogar y vecindario.
Desembale y organice las posesiones.
Consiga cualquier moblaje nuevo o decoración que se requiera.
Conoce a los vecinos.